Antes de conocer detalles de la vida deportiva y particular del camionero ruso Vladimir Chagin, es bueno recordar cómo logró tomar parte del Dakar 2011. Pero hasta último momento, nadie sabía si iba a ser de la partida. En noviembre, durante las pruebas en Clermont-Ferrand (Francia), el camión Kamaz fue seriamente dañado. Para las reparaciones necesarias se realizó un viaje de emergencia a Naberezhnye Chelny en Tatarstán, cuna del equipo.

El holandés Jan De Rooy, uno de los grandes adversarios del ruso, envió inmediatamente un tranporte desde Francia para cargar el averiado Kamaz y viajar a Rusia. Desde el accidente, los mecánicos trabajaron noche y día para tener el vehículo en orden para la partida en Buenos Aires, aunque no pudo ser despachada en el barco que trajo a la mayoría de las máquinas. Finalmente, fue enviada en avión.

Pero ese no fue el único incidente. El propio piloto demoró hasta límites insospechados su arribo (permaneció casi 48 horas "internado en el aeropuerto de Barajas, en España), debido a las tormentas de nieve de fines de diciembre en Europa, que originaron serias demoras en los vuelos. Estuvo a punto de llegar tarde y no poder largar.

Final feliz

Chagin, ya en carrera, también demoró en entrar en ritmo. Pero al final aceleró de gran manera y así retuvo la corona que ganó en 2010 en Sudamérica (y otras cinco veces en Africa). Otro detalle: este año alcanzó los 63 triunfos parciales en el Dakar, un nuevo récord de victorias de etapa en todas las categorías, siete por delante de su rival más inmediato en el palmarés, el francés Stéphane Peterhansel.

El intrépido piloto ruso, de 40 años, es considerado por muchos como uno de los mejores de la especialidad de la historia. De hecho, debido a sus éxitos, lo apodan "El Zar del Dakar".

Llegó a la competencia en 1996, al volante de un Kamaz y finalizó quinto. En 2000 logró su primera victoria. Repitió en 2002, 2003, 2004 y 2006, en terrenos africanos, 2010 y 2011, en Sudamérica.